Semana Santa, días de reflexión y acompañamiento a Cristo

La Semana Santa es el momento litúrgico más intenso del año para los cristianos. Sin embargo, para muchos se ha convertido sólo en una ocasión de descanso y diversión porque se olvidan de lo esencial: esta semana la debemos dedicar a la oración y la reflexión de la Pasión y Muerte de Jesús para aprovechar todas las gracias que esto nos trae.

El Padre Vicente López, Capellán de la Universidad Vasco de Quiroga (UVAQ), explicó que para vivir la Semana Santa debemos darle a Dios el primer lugar y participar en toda la riqueza de las celebraciones propias de este tiempo litúrgico.

Un artículo de Tere Vallés, redactora del portal religioso, Catholic.net, explica que a la Semana Santa se le llamaba “La Gran Semana”, ahora se le conoce también como Semana Mayor y a sus días se les dice días santos. Esta semana comienza con el Domingo de Ramos y termina con el Domingo de Pascua.

“Vivir la Semana Santa es acompañar a Jesús con nuestra oración, sacrificios y el arrepentimiento de nuestros pecados. Asistir al Sacramento de la Penitencia en estos días para morir al pecado y resucitar con Cristo el día de Pascua”, señala Tere Vallés.

¿Pero qué se vive y reflexiona en cada día de la Semana Santa? A continuación se explica cada uno de los ritos que hacen de esta celebración la Semana Mayor. 

Domingo de Ramos: Celebramos la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén en la que todo el pueblo lo alaba como rey con cantos y palmas. Por esto, nosotros llevamos nuestras palmas a la Iglesia para que las bendigan ese día y participamos en la misa.

Jueves Santo: Este día recordamos la Última Cena de Jesús con sus apóstoles en la que les lavó los pies dándonos un ejemplo de servicialidad. En la Última Cena, Jesús se quedó con nosotros en el pan y en el vino, nos dejó su cuerpo y su sangre. 

Viernes Santo: Ese día recordamos la Pasión de Nuestro Señor: Su prisión, los interrogatorios de Herodes y Pilato; la flagelación, la coronación de espinas y la crucifixión. Lo conmemoramos con un Via Crucis y con la ceremonia de la Adoración de la Cruz.

Sábado de Gloria: Se recuerda el día que pasó entre la muerte y la Resurrección de Jesús. Día de luto. Las imágenes se cubren y los sagrarios están abiertos. Por la noche se desarrolla la vigilia pascual para celebrar la Resurrección de Jesús. 

Domingo de Resurrección: También conocido como Domingo de Pascua. Es el día más importante y más alegre para todos los católicos, ya que Jesús venció a la muerte y nos dio la vida. Cristo nos da la oportunidad de salvarnos, de entrar al Cielo y vivir siempre felices en compañía de Dios. Pascua es el paso de la muerte a la vida.